La asociación, ubicada en la calle El Pozo, oferta terapias tanto cognitivas como físicas para intentar mejorar la calidad de vida de los pacientes y facilitar el día a día de sus familiares
AFALA es una asociación de familiares de Alzheimer que nació con el objetivo de ayudar a las familias que padecían esta enfermedad y servir de unidad de respiro en su día a día para sus familiares más cercanos. Su fundadora es Carmen Blanco, cuyos orígenes se remontan a 2006, a una sede en el C.C El Cascajo. En la actualidad se encuentran en la Calle El Pozo, gracias a la obra social de una entidad bancaria.
El centro con el que cuenta la asociación en Laguna de Duero está abierto a los pacientes de todo tipo de demencias o incluso a otras enfermedades incapacitantes como puede ser el párkinson o la esclerosis. Dentro de su oferta, ofrece terapias tanto cognitivas como físicas para intentar mejorar la calidad de vida de los pacientes para que la enfermedad no pueda ir a más, pero también para que sus cuidadores puedan tener un rato de respiro para poder realizar su vida cotidiana.
A corto plazo, tal y como comenta su presidenta, Marta Laherrán, su objetivo es tratar de ampliar el horario, dando un servicio de catering, para que los usuarios puedan quedarse a comer, ya que el centro, actualmente, cierra sus puertas a las 14:00 horas.
Laherrán reconoce que ”muchas personas nos conocen como asociación, pero no por nuestros servicios, y estos están abiertos a todas las personas, sin necesidad de que padecezcan Alzheimer. Por ejemplo, personas mayores pueden acudir para llevar a cabo ejercicios de memoria o de orientación a la realidad, ya que, por circunstancias de la edad, necesitan de estos servicios”.
El centro que posee la asociación cuenta con dos gerocultoras, que son las que se encargan tanto del cuidado físico como de llevar a cabo las actividades que se realizan en la asociación, una terapeuta ocupacional, que es la que realiza los programas técnicos que llevan a cabo las gerocultoras, una psicóloga, que da apoyo a los propios pacientes y a sus familias, y una oficial administrativo, que lleva a cabo todas las labores burocráticas, dando un asesoramiento para poder solicitar las ayudas de la Ley de Dependencia y poder cobrar la prestación económica vinculada.
En su intención de crecer y ofrecer un mejor servicio a los vecinos de la localidad, actualmente están en conversasiones con el Consistorio para que estos puedan facilitarles un local más grande, adaptado a las necesidades de los usuarios y poder así ampliar su oferta.
AFALA destaca por ser una asociación sin ánimo de lucro que solo busca el bienestar de los usuarios y sus familias. ”Estamos para ayudar a los pacientes en todo lo que necesiten, con unos profesionales bien formados y focalizados en el Alzheimer con una especialización en nuestras terapias”.
