El grupo de jóvenes fue sorprendido este lunes por la Guardia Civil y la Policía local en la zona del edificio Juan de Austria, con lo que desde el Ayuntamiento se vuelve a pedir responsabilidad
Tal y como han comunicado fuentes municipales, durante la tarde de este lunes, la Guardia Civil y la Policía Local de Laguna de Duero, en una actuación conjunta, fueron requeridos en las inmediaciones de la zona del edificio Juan de Austria, perteneciente a Diputación, debido a la presencia de un número elevado de jóvenes que, amparados en la lejanía del núcleo del municipio, «estaban reunidos sin hacer uso de las mascarillas». Según fuentes cercanas al caso, la Guardia Civil pidió la filiación de 11 de los adolescentes que no portaban la mascarilla, mientras que la Policia Local «salió en busca de los demás jóvenes que comenzaron a correr, pudiendo encontrar y filiar a otros cuatro».
Contra 15 de ellos se interpondrá denuncia por no portar la mascarilla que, recordamos, es de obligado cumplimiento en cualquier actividad que se desarrolle al aire libre o en espacios cerrados, independientemente de que se pueda mantener la distancia interpersonal o no. El alcalde, Román Rodríguez, y la concejal de Seguridad Ciudadana, Paula Carriba, afirman que «gran parte de los ciudadanos están cumpliendo con los requisitos pero aún hay una gran parte que no cumplen las normas que nos imponen desde la Junta con respecto a las medidas de seguridad para frenar, cuanto antes, la expansión de virus».
«Si bien es cierto que los vecinos y vecinas de Laguna de Duero llevan la mascarilla mientras van caminando por el pueblo o realizan sus compras y otras actividades, cuando se relajan porque están en terrazas o sentados en los bancos del municipio, se quitan la protección y ayudan a su expansión», señalan el primer edil y la concejal, quienes recuerdan a la población que «mientras no se esté consumiendo han de ponerse obligatoriamente la mascarilla». “Apelamos a la responsabilidad de los ciudadanos y ciudadanas de Laguna, así como a los visitantes, porque hasta el sábado hemos sido la única localidad en situación verde de todas las que nos rodeaban, habiendo pasado a la situación amarilla el pasado domingo. Se estaba haciendo medianamente bien, no sólo por los ciudadanos si no por el trabajo incesante de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad”, señalan.
La concejal de Seguridad Ciudadana, Paula Carriba, comenta que “es triste que después del duro y gran trabajo que se ha hecho por parte de la Guardia Civil,Policía Local y Protección Civil durante la primera oleada del COVID-19, ahora nos veamos obligados a volver a seguir de cerca los movimientos de los ciudadanos, a la desinfección de calles, lugares concurridos del municipio y otras actuaciones que tendremos que desarrollar próximamente como esto no pare”.
