El jugador lagunero hizo historia con la selección juvenil regional de balonmano playa este verano al conseguir la plata en el Campeonato de España de Selecciones Autonómicas.
Javier Pardo
“Un jugador comprometido, muy comprometido con el equipo, con muchas ganas de aprender y mejorar”, así es como le gustaría Alberto Pariente Álvarez (Valladolid, 2003) que le describieran sus entrenadores. El Club Balonmano Laguna le vio crecer como jugador desde la categoría alevín, “donde encontró la motivación por este deporte”. Hace dos temporadas ingresó en el Club Deportivo Balonmano Aula Cultural, donde “gracias al factor humano del club” ha mejorado hasta ser convocado con la selección de balonmano playa de Castilla y León y ganar una medalla histórica el pasado verano en el Campeonato de España de Selecciones Autonómicas.
A primeros de junio entró en la preselección de balonmano playa, una incipiente modalidad sobre arena que es “muy atractiva y espectacular tanto para los propios jugadores como para el espectador”, comenta Alberto. Continuó en las sucesivas convocatorias del combinado autonómico y los entrenadores contaron con él para el Campeonato de España de Selecciones Autonómicas de Cartagena.
El conjunto castellanoleonés se desplazó a Playa Porto Bello de la ciudad murciana con los pies en la tierra, puesto que conocían el nivel del resto de selecciones. Pese a caer en el primer partido contra Andalucía, el trabajo duro y un toque de superstición al elegir el color de las camisetas antes de cada partido hizo que ‘los de rojo’ llegaran a la final. Tras conseguir un triunfo histórico para Castilla y León sobre la arena, Pariente tiene claro su futuro: “trabajar duro y hacer todo lo posible para acudir a los campeonatos de balonmano playa y balonmano pista con la selección autonómica”.
Además de la medalla con la selección, la temporada pasada el BM Aula Juvenil consiguió disputar el playoff de ascenso a Primera División Nacional en la que ha sido la mejor temporada del lagunero hasta el momento. Este es el último año del lagunero en el deporte base y el objetivo actual con el club blanquiazul es “lograr el ascenso a primera división nacional”.
Aunque al lagunero le “apasiona” jugar, no descarta ser entrenador en un futuro. Si algún día llega a serlo, seguro que le transmitirá a sus jugadores el mensaje más importante que le han dado sus entrenadores y que ahora lleva por lema: “A base de esfuerzo y sacrificio diario se pueden lograr todos y cada uno de los retos que te propongas”.
