“Compaginar fútbol y estudios en EEUU es más fácil, ya que allí el deporte universitario es casi profesional”

El lagunero Hugo Gutiérrez se fue en agosto al estado de Idaho, donde ha comenzado a sacarse la carrera de Marketing al tiempo que cumple su sueño de jugar al futbol en el equipo Yotes, donde llegó al campeonato nacional en la última temporada.

Hay niños que sueñan con ser bombero, otros con ser astronauta, y algunos con ser youtubers, pero si hay una profesión que nunca pasa de moda entre los más pequeños es el querer ser futbolista. En el caso del lagunero Hugo Gutiérrez, que siempre se había imaginado jugando al futbol y viviendo en Estados Unidos, ese sueño se está haciendo realidad, pues desde agosto vive esa doble ilusión, compaginando sus estudios con el deporte.

A través de la agencia Athletes Development Management (ADM), Hugo consiguió una beca para estudiar Marketing en el estado de Idaho, donde además pertenece al club deportivo Yotes. “Les envié mis mejores jugadas y fueron ellos quienes me pusieron en contacto con los entrenadores de las universidades, y finalmente escogí el College de Idaho y su equipo, que juega en la liga NAIA, en la que participan más de 280 universidades de todo Estados Unidos”, explica.

Pero antes de llegar a la élite universitaria americana, el joven recuerda sus inicios en el fútbol vallisoletano que, según admite, ha sido el que lo ha visto crecer, tanto personal como profesionalmente. “Empecé jugando en mi pueblo, en el CD Laguna, pero cuando era benjamín quise probar el fútbol sala, donde me quedé durante cuatro años. Cuando llegué a la categoría infantil regresé al fútbol 11 y he de admitir que fue un gran cambio. Aquí jugué en el Simancas, el Atlético de Laguna y en la Sur, que fue el equipo en el que más crecí como futbolista y conseguí grandes resultados, como ser el máximo goleador cadete y campeones de liga, ascendí a la liga nacional en juvenil y ese primer año nos quedamos a las puertas del ascenso a División de Honor”, apunta.

Hugo relata que el camino hasta llegar a cumplir su objetivo de “sueño americano” fue “duro pero muy gratificante”, pues cada uno de los equipos en los que estuvo le aportaron “las aptitudes necesarias para llegar a donde estoy hoy”.

En cuanto a las principales diferencias con España sostiene que, en materia deportiva, las temporadas son mucho más cortas. “Comenzamos la pretemporada a principios de agosto, y a finales empieza la temporada, que termina a últimos de noviembre si llegas al torneo nacional, y ya en enero juegas partidos amistosos, con la vista puesta en el siguiente agosto”, comenta, y añade que la pretemporada “me dejaba reventado, dado que al no haber clase entrenábamos dos veces al día, a las 7:30 y a las 19:00 horas”.

Pero si algo le ha llamado la atención ha sido la gran relevancia que tiene el deporte en general en EEUU. “No es complicado compaginar fútbol y estudios, ya que el primer semestre prácticamente gira en torno al deporte, y los profesores dan prioridad a entrenamientos y partidos, dándote la posibilidad de hacer exámenes más tarde. Es increíble la repercusión que tiene… parece profesional incluso siendo universitario”.

En cuanto a los resultados conseguidos está “muy contento”, ya que su equipo se hizo con el Torneo de la Conferencia y pudo jugar los nacionales en Miami, una satisfacción que se suma a las vivencias que está experimentando, aunque revela que cuando llegó le costó “un poco adaptarse”. “Comencé muy ilusionado, porque todo era nuevo, pero, por ejemplo, creía que sabía mucho inglés y una vez aquí me di cuenta que tenía que mejorar”. Sin embargo, sostiene que el hecho de haya muchos estudiantes internacionales es “muy enriquecedor”, pues le permite tanto practicar el idioma como conocer “un montón de culturas diferentes”.

Hugo ya tiene la vista puesta en la siguiente temporada “y en hacer una buena campaña para seguir creciendo como jugador”, y admite que aunque puede ser complicado no le importaría dedicarse profesionalmente al fútbol “y como sueño inalcanzable jugar en el Real Madrid”, apunta entre risas, y anima a todo aquel que quiera compaginar deporte y estudios a hacerlo en Estados Unidos.