El equipo de Gobierno ha desmentido las acusaciones de su “inacción” ante las reclamaciones de los vecinos, remarcando que “sí que se está dando respuesta”, y ha advertido que la media de la tasa “de la que habla el PSOE no es real”
La tasa de basuras continua en el punto de mira de los gobiernos locales, y desde el Consistorio de Laguna de Duero han querido reiterar su rechazo hacia este impuesto en una rueda de prensa, recordando que “no se trata de una decisión propia, sino de una imposición por parte del Gobierno Central”. “Ni el Ayuntamiento ni este equipo tenía intención de imponer la tasa de basuras, pero la ley 7/2022 nos obliga, y en ella se especifica que la tasa no puede ser deficitaria y tiene que hacer frente a unos costes reales del servicio de recogida y tratamiento de residuos”.
Puntualizan además que desde “la Comisión Europea se ha desmentido la afirmación de que Europa obliga a España a imponer la tasa de basuras, ya que lo que la Comisión establece es que los países deben utilizar instrumentos económicos para la gestión de residuos, por lo que la creación de una tasa municipal obligatoria no es la única vía para cumplir la normativa, ya que los estados miembros tienen la capacidad de elegir cómo implantar estas medidas. La implementación de la tasa de basuras es una decisión del Gobierno de España, no una imposición directa de la Unión Europea”.
Asimismo, señalan que “ya no es el momento de recurrir la tasa”, puesto que esta lleva en vigor desde el 1 de enero de 2025, y desmiente las acusaciones de “inacción” de la oposición sobre las alegaciones que se están recibiendo por parte de los laguneros y laguneras. “Nuestra obligación es recoger y tramitar las reclamaciones de los vecinos, y todas ellas se están resolviendo”.
Aclaran que, el cálculo de la tasa, “no responde a ninguna decisión de ningún partido”, sino que se ha elaborado a partir de un estudio hecho por los técnicos municipales “con el que se ha calculado que este servicio asciende en el municipio a 1.270.000 euros que hay que repartir entre todos los usuarios en función de unos parámetros”.
De esta manera, explican que la forma de calcular cuánto tiene que pagar cada vecino responde a la suma de una cuota fija del 65% que corresponde al valor catastral de la vivienda, y una cuota variable del 35% que se calcula por la producción de residuos estimada de cada vivienda en función del número de personas empadronadas en la misma.
En esta línea se establecen dos tablas en las que se fijan los precios. En cuanto a la cuota fija, si el valor catastral es menor de 20.000 euros, la cuota será de 60,89 euros; si es mayor de 20.000,01 a 30.000 euros la cuota será de 73,07 euros; si el valor se encuentra entre los 30.000,01 y los 50.000 euros la cuota fija será de 85,24 euros; si el valor catastral es de entre 50.000,01 a 100.000 euros la cuota será de 109,60 euros; y si el valor es de 100.000,01 euros, la cuota será de 121,78 euros.
Por su parte, la cuota variable se calcula por el número de empadronados, de tal forma que si no hay empadronados en la casa este valor será cero; si por el contrario hay una persona empadronada, la cuota variable será de 38,71 euros; si los empadronados son dos, la cuota será de 46,46 euros; si hay tres personas empadronadas, la cuota será de 54,20 euros; si por el contrario son cuatro la cuota será de 61,94; y si los empadronados en la vivienda son cinco o más la cuota será de 69,69 euros.
“Una vez los vecinos tengan ambos valores calculados tendrá que sumarlos y esa será su tasa de basuras”, aclaran. Hacen hincapié además en que, la tasa media a la que se refiere el Partido Socialista “es mentira”. “Ya hemos recibido 2.215 recibos cobrados aproximadamente, el 20 por ciento, y la cuota media es de 121,01euros, no 147 euros, como dice el PSOE. Ellos no pueden calcular una media cuando no contemplan los parámetros de la ordenanza con respecto a las viviendas de Laguna como hacemos nosotros”.
Por su parte, remarcan que la intención del Consistorio es “hablar con la Mancomunidad y ver qué vías puede haber para reducir el servicio y que el coste no sea tan alto”. Y añaden que “si se recicla, el coste del tratamiento de nuestros residuos sería más bajo, pero esto solo depende de los ciudadanos”. Por el momento, indican que la forma de reducir el importe de la tasa es acogerse a las bonificaciones.
“Hemos creado tres tipos de bonificaciones, aplicables a la cuota variable, que responden, por un lado, a razones sociales, y por otro, a razones medioambientales”. En el caso de las primeras explican que ha dos tipos; una que acoge a personas vulnerables, por la que se podrían beneficiar de una reducción del 75% de la cuota variable para aquellas personas cuya renta familiar no sea superior a la multiplicación por 2 del Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM). Y la segunda se refiere a familias numerosas, donde se aplicaría exclusivamente a unidades familiares cuyas declaraciones individuales o conjuntas del IRPF de los miembros que estén empadronados en el domicilio no superen la cantidad de 35.000 euros en familias de hasta 5 miembros; de 40.000 euros en familias de 6 miembros; y de 45.000 en familias de 7 o más miembros. Y en caso de cumplir estos supuestos, las bonificaciones deberán solicitarse en los dos primeros meses de cada ejercicio.
Mientras, la correspondiente al medioambiente conlleva una reducción del 75% para aquellos que se acojan a un programa de compostaje domiciliario individual y estén dados de alta en el mismo -a través del registro creado por el Ayuntamiento de Laguna- antes de que finalice el ejercicio anterior.
El equipo de gobierno aclara que “cada vecino recibirá una notificación para el pago antes de la finalización del año, y que a partir de 2026 podrán domiciliar los recibos para mayor comodidad”.










