El grupo municipal llevará al próximo pleno esta propuesta para la realización de un proyecto piloto del «único sistema que ha demostrado cumplir el requisito europeo del 90% de recogida separada de botellas de PET».
Este próximo martes se debatirá en el pleno ordinario del Ayuntamiento de Laguna de Duero una moción registrada por el Grupo Municipal Izquierda Unida-Podemos en la que propone impulsar en el municipio una transición en el modelo de gestión de los residuos de ciertos envases hacia la implantación del Sistema de Depósito, Devolución y Retorno (SDDR). La medida planteada, según argumenta el grupo municipal, serviría como “medio para luchar contra el cambio climático, a la vez que mejore la imagen del municipio, cree empleo y optimice el uso de los recursos municipales.”
El SDDR es un sistema de gestión de residuos de envases paralelo al sistema de recogida de envases actual y que se destina solamente a los envases de bebidas, para lo que asocia un valor a cada envase para que éste sea devuelto por el consumidor para su reciclaje. A medio plazo, el sistema de gestión de residuos que está implantada actualmente deberá seguir existiendo como complemento al SDDR para la gestión de los envases que actualmente no están incluidos en dicho sistema, por ejemplo las latas de conservas, envases de productos lácteos, licores y vinos o bandejas de poliespán.
En la actualidad, de todos los residuos de envases de plástico generados, sólo se recupera el 25,4%, según las estimaciones del propio Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), una realidad que hace “casi inexorable la llegada del SDDR”, en opinión de Jesús Salamanca, concejal de Izquierda Unida, que asegura que esta medida cuenta con un “inmenso respaldo social”, según datos arrojados por encuestas recientes que apuntan a que el 85% de los españoles ven favorablemente la idea de devolver en el comercio una botella de plástico de agua, una lata de refresco, un brik de zumo o una botella de vidrio de cerveza y recuperar el dinero previamente dejado como depósito.
La nueva Ley de Residuos, aprobada el pasado marzo, confirma la determinación del Congreso de abrir la puerta al SDDR y marca un rumbo claro hacia un futuro en el que no acaben abandonados en nuestro entorno natural 35 millones de envases de bebidas cada día. La ley vincula la puesta en marcha de la “devolución del casco” con el cumplimiento de los objetivos de recogida separada de botellas de plástico a partir del 2023, que se sitúan inicialmente en un 70%.
Desde IU-Podemos aseguran que el SDDR reduciría los costes de limpieza de calles y plazas, además de la cantidad de residuos recogidos y los gastos directamente asociados a su gestión. Actualmente, el 20%, de media, de todos los residuos recogidos en los municipios de Valladolid son envases de bebidas, de los cuales sólo tres de cada diez se depositan en el contenedor adecuado. De media, dos tercios de estos envases se depositan en el contenedor de resto, con el consiguiente coste que esto supone para las arcas municipales.
“Basta con un mínimo estudio del funcionamiento del sistema de gestión de residuos imperante en España para ver lo lejos que estamos de cumplir los objetivos de reciclaje marcados a nivel internacional,” afirma Jesús Sáez, concejal de Podemos y portavoz del grupo municipal. “En los más de 40 países donde está implantado, el SDDR se ha demostrado significativamente más eficaz que el sistema que tenemos ahora. Presentamos esta moción con el fin de que en los próximos años las prácticas de este municipio se desarrollen dentro del marco legal establecido por la nueva Ley de Residuos, en cumplimiento de las exigencias trasladadas desde la Unión Europea.”
