La cuantía permitirá abordar distintas inversiones con cargo al remanente, como la adquisición de nuevos filtros de carbono para la depuradora, la primera fase del nuevo centro juvenil o la construcción del panel acústico en la zona sur del municipio, entre otros proyectos.
El pleno del Ayuntamiento de Laguna de Duero de mayo, celebrado este martes, sirvió para votar la aprobación definitiva del presupuesto de 2021, la cual contó con los votos favorables de todos los grupos con la salvedad de la abstención del PSOE y el voto en contra de Vox. En la sesión plenaria se dio cuenta asimismo de la liquidación de las cuentas de 2020, las cuales, según se informó, han dejado un superávit que se traduce en un remanente líquido de tesorería de 5.761.950 euros.
Esta cifra, según dio a conocer el portavoz de IL, Juan Carlos Rodríguez, “permitirá afrontar unas inversiones que llevábamos tiempo demandado prácticamente sin necesidad de enajenar el patrimonio”. Es decir, que todas las inversiones presupuestadas para 2021 que estaban supeditadas a la venta de patrimonio municipal podrán ejecutarse gracias a este remanente, gracias, en parte, a que, debido al impacto de la pandemia, el Ministerio de Hacienda permite a los Consistorios utilizar el superávit en proyectos de inversión financieramente sostenibles, algunos de los cuales se veían impedidos hasta el momento por la Regla de Gasto. “El presupuesto de gasto es bastante realista y razonable teniendo en cuenta la cifra de ingresos netos que arroja la liquidación, algo superior a lo que habíamos calculado en un primer momento”, puntualizó Rodríguez.
Entre las inversiones que este remanente permitirá –y que estaban incluidas en el presupuesto mediante partidas simbólicas de seis euros- destaca el cambio de los filtros de carbono en la ETAP del municipio, para lo cual se destinarán alrededor de 600.000 euros, así como la construcción de una pantalla acústica en la zona sur del municipio. Este segundo proyecto, destinado a evitar el impacto sonoro en las viviendas cercanas a la N-601, se llevará a cabo a través de una inversión de 140.000 euros, y es una prioridad “acordada con el resto de grupos municipales para dar respuesta a esta reivindicación de los vecinos”. Para su ejecución, el Ayuntamiento deberá tramitar las distintas gestiones con el Ministerio de Fomento.
A estas inversiones se suma la primera fase del nuevo centro juvenil -dotada con 250.000 euros en los presupuestos de este año-, la tercera fase de las obras de retirada de tuberías de fibrocemento -que supera los 80.000 euros-, la puesta en marcha del bar de las piscinas municipales o la renovación de instalaciones deportivas y la construcción de un nuevo espacio Skatepark. La intención del equipo de gobierno es aprovechar esta situación de saneamiento en las cuentas para seguir acometiendo en adelante la retirada del fibrocemento en nuevas zonas o la instalación de nuevos parques infantiles.
Desde el grupo socialista, tras conocer los datos económicos del pasado ejercicio, se señaló que las cifras del remanente tras la liquidación de las cuentas de 2020 “demuestran una ausencia total de gestión”. “La inversión ha sido cero en el pasado ejercicio, y de las transferencias corrientes ha quedado más de un 40% sin ejecutar”, apuntó Francisco Barbillo. “Acumular este remanente no es ningún logro, precisamente la gestión debería haber ido dirigida a paliar los efectos de la pandemia y se ha perdido una ocasión de oro”, apostilló.
Desde el equipo de gobierno, Juan Carlos Rodríguez apuntó que “no es que nos vanagloriemos de haber obtenido este remanente, pero afortunadamente este año nos permitirán gastar una buena parte del mismo en realizar diversas inversiones que necesitamos”.
