Con cerca de 70 gimnastas, el club compite a nivel escolar y base nacional. Además, destaca por su filosofía de unión entre las diferentes categorías. Hablamos con Ángela González, Directora técnica; y Alberto Sanz, Presidente, quienes nos cuentan su historia y evolución
El inicio del Club Rítmica Boecillo se remonta a 2012. Un grupo de padres decidió crear un equipo independiente en el municipio debido a que la escuela deportiva dependía de otra entidad en Valladolid que no estaba respondiendo a las necesidades de las gimnastas. En 2016, el conjunto contactó con Ángela González, actual Directora técnica, que desde hace siete años está plenamente comprometida con el club. Alberto Sanz se ha unido a la entidad naranja como Presidente, con la tarea de gestionar principalmente los aspectos extradeportivos durante más de año y medio.
Actualmente el club cuenta con cerca de 70 gimnastas, aunque tuvo un comienzo modesto con solo 14 niñas. Pese a las dificultades, las chicas han logrado competir a nivel escolar y tienen a 16 promesas de la rítmica compitiendo a nivel base nacional. Aunque inicialmente solo contaban con dos entrenadoras, actualmente tienen una plantilla de nueve, incluyendo a algunas de las niñas que llegaron en los primeros años y que ahora son entrenadoras y ayudan a las más pequeñas. El apoyo del pueblo de Boecillo ha sido fundamental en el éxito del club. Desde el principio, han recibido una gran acogida y se han sentido arropados: “El esfuerzo y organización en la gimnasia rítmica del pueblo ha sido reconocido, permitiendo un crecimiento exponencial y el apoyo del Ayuntamiento con instalaciones y recursos como un tapiz o las espalderas”.
A nivel deportivo, el Club Rítmica Boecillo ha sido pionero en contratar profesionales especializados, como un psicólogo deportivo. “Es un deporte complejo y especial que implica mucha presión para niñas de tan solo once años compitiendo a nivel nacional. Hemos querido ayudar y preparar lo mejor posible a nuestros equipos. Es un valor añadido que no existe en otros equipos y deportes”, explica Alberto. Desde el principio, la filosofía del Club Rítmica Boecillo ha estado clara: ser una familia y no permitir que las diferentes categorías generen separación. Para ello, se realizan muchas actividades en equipo, como ir a parques de atracciones, al cine o los campamentos y convivencias durante el año. “Somos el único club de Valladolid que realiza actividades totalmente lúdicas para que las niñas se diviertan y formen un grupo sólido fuera de la gimnasia”, asegura Alberto.
La unión de los conjuntos en las competiciones escolares y nacionales es crucial y se destaca por el apoyo mutuo entre ellas, incluso cuando participan en diferentes niveles. Los padres también son una parte importante del club, brindando apoyo y disfrutando del deporte al acompañar a sus hijas a campeonatos y verlas felices y motivadas. Para Alberto y Ángela, la clave está en que los padres disfruten del deporte tanto como sus hijas. Otro de sus propósitos es mantener el equilibrio actual entre chicas que compiten a nivel nacional y escolar. “No se puede tener al 80% del club en categoría nacional y el 20% en escolares, no es sostenible ni deportiva ni económicamente. Se necesita un número significativo de escolares, y aquellas que destaquen y se involucren ascenderán”.
De manera inesperada, el Club Rítmica Boecillo se ha posicionado en el “top 3” de la provincia, junto con CD Valladolid y CD La Victoria, convirtiéndose en uno de los clubes revelación a nivel nacional. “Hemos obtenido el oro provincial en las categorías infantil y juvenil, y la plata en cadete. Además quedamos séptimas en el último campeonato de España. Está claro que los resultados siempre dependerán de cómo lo hagas, pero el trabajo y el nivel son notorios”, indica Ángela.
Más de la mitad de las gimnastas provienen de Boecillo, aunque un gran número de chicas se desplazan desde diferentes lugares de la provincia, como Cuéllar, Íscar y Pedrajas, entre otros, para formar parte del movimiento naranja. Otros logros de la temporada han sido consagrarse campeonas autonómicas a nivel nacional y escolar, además de alcanzar el quinto puesto en el Euskalgym, uno de los campeonatos más importantes de España. En su primer Campeonato Nacional, lograron ubicarse entre los 20 mejores de un total de 80 conjuntos, saltando directamente desde categorías escolares.
Los objetivos deportivos del club son obtener buenos resultados en cada competición. Sin embargo, en la gimnasia rítmica, el éxito depende de muchos factores como salir en un buen puesto y que las gimnastas tengan un buen desempeño en el día de la competición. El objetivo es que las chicas salgan satisfechas y contentas con el trabajo realizado. “Al final, es una lucha contra ellas mismas y nunca nos vamos a fijar como conseguir medallas. Si viene, perfecto. Pero no es una presión para nosotros”, admiten. El Club Rítmica Boecillo invita a quienes estén interesados en este deporte a unirse y disfrutar en un ambiente acogedor y de apoyo, ofreciendo oportunidades tanto para aquellos que deseen competir a alto nivel como para los principiantes. “En Boecillo, hay gimnastas de todos los niveles y el club los necesita”, concluyen.