Tras dos décadas en la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui, el lagunero acaba de participar en la Caravana Solidaria, trasladando material humanitario a Tinduf
Tras el reciente giro diplomático sobre la cuestión del Sáhara, no son pocas las voces que se han alzado ante un posible acuerdo del que depende el futuro de la antigua provincia española. Una de ellas es la del lagunero César Lomas, quien colabora activamente desde hace veinte años en la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui. Su implicación con esta causa se remonta al momento en que decidió abrir las puertas de su casa a Azmán, un niño de acogida que, por distintas circunstancias, acabó residiendo en nuestro municipio tras superar una enfermedad. “Azmán mantiene muchos vínculos con su familia y su comunidad, y desde que le acogí empecé a viajar a los campamentos para prestar toda la ayuda posible”, explica Lomas.
A día de hoy, el lagunero sigue participando con la asociación -compuesta por alrededor de cien personas-, a través de la cual colabora con distintas iniciativas de envío de material humanitario. Una de ellas es la Caravana Solidaria 4×4, coordinada desde Rivas (Madrid), la cual acaba de llevarse a cabo el pasado mes de febrero. Esta consiste en el traslado de vehículos -ambulancias, camiones o todoterrenos- cargados de material escolar, deportivo y sanitario, y en ella participan “cada vez más personas”. “Este año la caravana ha estado compuesta por 16 vehículos y 27 personas, y ha permitido dotar de recursos a escuelas y hospitales antes de nuestro regreso”, explica el lagunero.
En concreto, desde Valladolid han partido dos ambulancias de Ambuibérica repletas con 2.000 kilos de leche en polvo entre otros materiales. Se trata, normalmente, de material adquirido por la asociación o donado por empresas. Tras unirse al resto del convoy en Madrid y embarcar en Alicante, la agrupación llegó a Orán en Ferry, desde donde viajaron 1.800 kilómetros escoltados por las autoridades argelinas. “La policía y el ejército de Argelia se portan genial y nos dan combustible hasta llegar a los campamentos de refugiados. El trayecto de ida y vuelta a Tinduf (Argelia) son doce días, y una vez allí organizamos y entregamos todo y volvemos en avión”, apunta Lomas, quien afirma que “el recibimiento de los saharauis es buenísimo, siempre nos tratan estupendamente e intentan agasajarnos”.
Otra de las iniciativas son los envíos de material en contenedores. El próximo se llevará a cabo en mayo, con 24.000 kilos de los cuáles la mayoría serán alimentos. Por otro lado, desde la Asociación se lleva a cabo el proyecto ‘Vacaciones en Paz’, que consiste en la acogida de niños saharauis durante el período estival y en el que han participado ya numerosas familias laguneras. Sus voluntarios siguen además todos los proyectos educativos y supervisan el uso de los recursos para que la ayuda sea lo más efectiva posible. Lamentablemente, el Covid-19 ha impedido el correcto funcionamiento de todas estas iniciativas, tal y como reconocen desde la asociación.
Gracias a todas estas actuaciones, en los últimos años la situación ha mejorado en los campamentos. “Ahora hay luz, viviendas de barro, carreteras, vehículos, pequeños comercios… gracias, en gran parte, a Argelia, que les presta mucha atención”, explica Lomas. “Son unos 2.000 refugiados que Naciones Unidas tiene obligación de atender, y viven en un desierto que no produce nada, con lo que sus necesidades siguen siendo prioritarias y si salen adelante también es con la ayuda solidaria enviada desde España”, explica el lagunero. Además de las distintas crisis, a los problemas de los saharauis se suman las lluvias torrenciales, que a menudo derivan en destructivas trombas de agua. “Dada su situación ellos tampoco tienen intención de desarrollar mucho los campamentos, ya que su objetivo es poder volver a su territorio”, afirma el lagunero.
En vista del giro diplomático anunciado por el Gobierno de España el pasado mes de marzo, Lomas considera que “este cambio de rumbo es muy negativo, porque durante 43 años España siempre ha estado al lado de los saharauis, cuya administración territorial sigue siendo española”. “Es una traición y la única solución política posible pasa por Naciones Unidas, ya que es un territorio ocupado”, señala el lagunero, quien aboga por “el diálogo y el entendimiento amistoso”. Desde la Asociación opinan que “es difícil de entender un giro diplomático tan brusco, puesto que en 2020 y 2021 las declaraciones gubernamentales eran a favor del pueblo saharaui”. La parte “positiva” de la polémica, apuntan, es que “todo el mundo se ha volcado con la causa y el asunto del Sáhara ha vuelto a estar de actualidad”.
“El Sáhara es un territorio muy rico en pesca y el minerales y con muchísimo potencial, hay mucho interés por parte de muchos países en explotarlo económicamente, y esa es una de las causas del problema que arrastra desde hace tantos años”, reflexiona Lomas. Como voluntario, el lagunero anima a todos los vecinos a colaborar con la asociación, sea a través de donaciones de productos o alimentos o con el programa de acogida de verano.