El vehículo infractor, un BMW M3, fue detenido por una patrulla de la Guardia Civil, que investiga al conductor por un posible delito contra la seguridad vial
Un vehículo ha sido detectado por un cinemómetro móvil de la Guardia Civil cuando circulaba a 219 kilómetros por hora a la altura del kilómetro 177 de la carretera N-601, a la altura de Boecillo, en sentido Madrid, una vía que está limitada a 90 kilómetros por hora.
Según ha señalado el instituto armado, una vez detectada la infracción, una patrulla de la Guardia Civil de Valladolid procedió a detener el vehículo infractor -un BMW M3- en el kilómetro 174 de la misma carretera, más al sur. Posteriormente, el equipo de investigación de siniestros viales del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil llevó a cabo la investigación del incidente por la posible comisión de un delito contra la seguridad vial, remitiendo las diligencias correspondientes al Juzgado de Instrucción de Guardia de Valladolid.
Con esta infracción, se ha registrado el segundo delito contra la seguridad vial por exceso de velocidad en el período de una semana, según se ha señalado. En esta otra ocasión, se detectó un vehículo Audi A6 circulando a 180 km/h en el kilómetro 171,700 de la misma vía.
Desde la Guardia Civil se recuerda que «el Código Penal en su artículo 379 establece que quien condujere un vehículo a motor o un ciclomotor a velocidad superior en sesenta kilómetros por hora en vía urbana o en ochenta kilómetros por hora en vía interurbana a la permitida reglamentariamente, será castigado con la pena de prisión de tres a seis meses o con la de multa de seis a doce meses o con la de trabajos en beneficio de la comunidad de treinta y uno a noventa días, y, en cualquier caso, con la de privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta cuatro años».
«Todo conductor al volante debe circular según la velocidad genérica o específica de la vía y las circunstancias existentes. Este tipo de acciones negligentes y arriesgadas no solo ponen en peligro la integridad de otros usuarios de la vía, sino la propia vida y la de las personas que viajan en el vehículo», informan.