El alcalde, Avelino Álvarez, ha felicitado a la organización y a los participantes por poner en el mapa de los belenes a Laguna y «conseguir por fin esta merecida declaración como Fiesta de Interés Turístico Regional»
El Ayuntamiento de Laguna de Duero ha recibido este miércoles en el salón de plenos a algunos de los integrantes de la Asociación Cultural Aceña, promotores del Belén Viviente que cada Navidad recrea el nacimiento de Jesús y la vida en aquella época «cuidando cada detalle para que sea lo más realista posible». El objetivo de esta convocatoria no ha sido otro que «reconocer la excelente labor» de esta agrupación por su compromiso año a año por mantener esta actividad «que ya es un imprescindible de nuestras fiestas navideñas».
Durante el acto, el alcalde del municipio, Avelino Álvarez, ha agradecido el «esfuerzo que desde la Aceña hacen para poner a Laguna en el mapa con una representación de calidad en la que hay involucrada muchísima gente y con quienes nos llena de orgullo contar en la localidad».
Álvarez ha comentado también la evolución que ha ido experimentado el Belén Viviente a lo largo de los años, poco a poco mejorando aspectos que han hecho que en este vigésimo quinto aniversario «y de manera muy merecida» lo hayan declarado Fiesta de Interés Turístico de Castilla y León.
Además, el regidor ha aprovechado para lanzar un reto a los asociados, y puesto que participan en la procesión de La Borriquilla durante la Semana Santa, les ha propuesto dinamizar este evento. «Me gustaría potenciar algo religioso y sobre todo algo cultural que se hace en este pueblo y que no está suficientemente reconocido».
Álvarez ha extendido también su agradecimiento al Área de Bienestar Social -algunas de sus trabajadoras han estado presentes en el acto- «y en especial a su concejala, Estela Crespo, por ayudar a las asociaciones locales a dinamizar nuestro municipio».
Por su parte, Antolín Fernández, presidente de la Asociación Cultural La Aceña, ha querido hacer un pequeño repaso de esa evolución comentada por el regidor desde sus comienzos en el interior de la iglesia hasta su llegada a la ubicación actual en el Centro Cívico El Cascajo. «Al principio apenas había decoración y después fuimos ampliando con cartones pero después quisimos seguir mejorando y creamos el pueblo con casetas y módulos que hoy conforman la recreación».
Emocionado, Antolín ha querido agradecer a todos los colaboradores y agentes implicados en que el Belén Viviente «sea lo que hoy es», pero en especial a Lorenzo Duque. «Fue un impulsor muy fuerte, dio su vida y su trabajo por el Belén y es una persona que se lo merece».
En cuanto al tema de la procesión, Fernández ha recogido la propuesta del alcalde, matizando que para ellos sería un placer «darle un toque más dinámico», y para ello ha solicitado «mayor implicación por parte del Consistorio». En el acto han estado presentes representantes de diversos grupos políticos con representación municipal.
Fotografías: Santiago Bermejo.