Desde el equipo de Gobierno aseguran que las instalaciones «cumplen con los estándares de accesibilidad, seguridad y eficiencia energética» y recuerdan las inversiones anuales en este espacio para su mantenimiento, anunciando una nueva partida de intervención para 2025 que supera los 70.000 euros
El Grupo Municipal Izquierda Unida-Podemos presentó en el pleno ordinario del pasado jueves una moción con la que pretendía impulsar un plan de acción “integral y urgente” para dignificar el Centro Cívico ‘El Cascajo’ mediante la subsanación de las “diversas deficiencias” de las que adolece este espacio municipal. Según se expone en el texto de dicha propuesta, ‘El Cascajo’ «no solo no reúne las condiciones necesarias de seguridad y accesibilidad, sino que tampoco cumple con los estándares mínimos deseables de eficiencia energética, a pesar de que en sus salas se realizan un amplio espectro de actividades asociativas, sociales, culturales y formativas».
Desde IU-Podemos resaltaron el impacto que tiene este centro de atención ciudadana en la calidad de vida de los vecinos. “En Laguna, una localidad con una falta manifiesta de espacios públicos a disposición de la ciudadanía para la realización de actividades vecinales, la importancia de ‘El Cascajo’ para la vida social y cultural es mayúscula y lamentamos la falta de voluntad del equipo de gobierno de velar por el correcto funcionamiento de nuestros espacios públicos”, sentenciaron, apuntando a una situación de “abandono generalizado” de gran parte de los espacios de titularidad municipal, incluyendo los edificios catalogados como patrimonio de la localidad.
A su modo de ver son «especialmente urgentes» la reparación de la cubierta, por la que se filtra agua en los días de lluvia, generando goteras, humedades y moho negro, siendo este último perjudicial para la salud de las personas. Proponen también la realización de obras de mejora de la eficiencia energética como la sustitución de ventanas, algunas de las cuales tienen agujeros o presentan un riesgo de seguridad, o la instalación de termómetros para poder regular la temperatura de las salas.
Asimismo, aseguran que ‘El Cascajo’ es uno de los números edificios públicos de Laguna de Duero que no son accesibles para personas con movilidad reducida. IU-Podemos considera necesario revertir esta situación a través de la instalación de plataformas elevadoras verticales o salvaescaleras que permitan el acceso a las aulas de la primera planta de las personas que no puedan subir las escaleras andando y la modificación de los baños para que cumplan con los estándares de accesibilidad. Para la agrupación, centros cívicos como este “juegan un papel fundamental en el fomento de la participación ciudadana, el asociacionismo y el acceso a la cultura”. “Es un espacio de encuentro y convivencia abierto a todas las personas, que ayuda a fortalecer la comunidad lagunera. Este es el valor de lo público, algo que el actual equipo de gobierno evidentemente no está priorizando”, señalaron.
Por su parte, y en respuesta a dichas acusaciones reflejadas en el escrito, el concejal de Servicios Económicos, Juan Carlos Rodríguez, instó al grupo a «retirar» dichos reproches por la gravedad de los mismos. Rodríguez explicó que «desde que el centro pasó a ser titularidad del Ayuntamiento todos los años se ha destinado una partida presupuestaria para su mantenimiento», recordando las diferentes intervenciones en las instalaciones que se han llevado a cabo últimamente, como la pintura de la fachada o las mejoras en las calderas y carpintería del edificio. Además, el edil adelantó que, de hecho, el presupuesto para 2025 contempla una partida que supera los 70.000 euros para realizar acciones en El Cascajo.
Por otro lado, apuntó que lo que sí es necesario en los inmuebles del Ayuntamiento es el libro de edificio, donde se incluye el manual de uso y mantenimiento. Sobre esto, el edil señaló que, aunque no es obligatorio porque este texto solo es necesario en edificaciones que han sufrido remodelaciones integrales, «los servicios están trabajando para que, en cuanto sea posible, podamos elaborar los libros de cada uno de los edificios municipales».
Finalmente, la moción se desestimó con nueve votos a favor y once en contra.