Esta veintena de jóvenes ha sabido llevar la diversión y la camaradería a cada rincón del municipio durante más de una década. Para ellos, las fiestas son siempre un reencuentro.
Laguna de Duero ha sido testigo del nacimiento y crecimiento de numerosas peñas a lo largo de los años. Sin embargo, cada vez hay menos grupos de jóvenes que permanecen juntos en el tiempo. Uno de los pocos ejemplos es la peña Sentenciados, un grupo de amigos que ha forjado una fuerte unión desde su infancia y que ha dejado huella en las fiestas y eventos de la localidad. “La peña existe desde que éramos pequeños. Fuimos el típico grupo de amigos que se conoció en infantil, poco a poco se fue ampliando con nuevos amigos que llegaban al colegio o se unían a las actividades extraescolares”, relatan.
“Fue en 2011, cuando estábamos en primero de la ESO, que decidimos formalizar nuestra peña con un nombre y colores propios”, agregan. “Estábamos en el patio, en pleno recreo, y decidimos coger un diccionario y leer palabras al azar. Así encontramos la palabra ‘sentenciado’ y nos pareció buena idea. Era un nombre de peña que no se había visto en Laguna antes”, explican con entusiasmo.
A lo largo de los años, la peña Sentenciados ha experimentado cambios en su composición, pero su esencia y espíritu de amistad se han mantenido intactos. En la actualidad está compuesta por veinte miembros, pero admiten que siempre están abiertos a que nuevas personas se unan a ellos. Son muy buenos amigos y si alguien trae a alguien que ha conocido, lo adoptan rápidamente. La sede de la peña ha sido un elemento clave en su historia. “Hemos tenido varios locales a lo largo de los años. Al principio, nos reuníamos en el patio de una casa cerca de la Plaza de Toros. Era un lugar perfecto para las fiestas, y siempre teníamos a alguien con quien estar”, comentan. “Luego tuvimos otro local en la plaza de las comunidades, e incluso pasamos un verano en una nave. En los últimos años hemos compartido local con otras peñas en ‘La Salita’, indican.
La unión y el espíritu de familia se han mantenido gracias a la cercanía entre los miembros de la peña. “Como llevamos juntos tantos años, nos consideramos hermanos. Sabemos que siempre podemos contar unos con otros”, afirman en conjunto. “Aunque ahora no nos vemos todos los días, como antes, podemos contar con el apoyo de nuestros amigos en cualquier momento. Esa es la clave de nuestra unión duradera”, añaden.
La peña participa activamente en las fiestas y organiza actividades para el disfrute de todos. “Hemos organizado la limonada en las fiestas, donde hemos recibido a muchas personas, incluso familias, para disfrutar al aire libre con música”, explican. Además, siempre han participado en las carrozas del pregón. El año pasado montaron una carroza para que los vecinos pudieran disfrutar de la música de Paulo Nantes, uno de los miembros, en la subida a la Ermita.
Ante la llegada de las fiestas de este año, la peña alberga grandes expectativas: “Esperamos que las fiestas sigan mejorando poco a poco”. Explican que tanto las fiestas patronales como las celebraciones de San Pedro experimentaron una notable mejora gracias al arduo trabajo de Charly al frente de la asociación de peñas y a una mayor atención por parte del Ayuntamiento. “Después de muchos años, por fin nos han empezado a escuchar, y creemos que trabajando juntos se pueden lograr grandes cosas”, añaden. Mirando al futuro, la peña tiene grandes proyectos y objetivos. “Queremos seguir participando en todos los eventos del pueblo, como torneos de peñas y concursos de carnavales. Además, queremos sorprender a todos durante las fiestas con actividades especiales, como la carroza hecha de andamios que fue todo un éxito el año pasado”, explican. Su objetivo es seguir fortaleciendo su amistad y seguir dejando huella en Laguna de Duero.
