Los profesionales se han concentrado de nuevo este lunes en las puertas del centro para reivindicar estas exigencias
Ha pasado una semana desde que el Centro de Salud de Laguna viviera un desagradable episodio cuando una de las sanitarias de urgencias fue agredida por una paciente tras negarse a extenderle una receta «por no tratarse de una urgencia».
Al día siguiente, el personal del centro se concentró a las puertas de las instalaciones en señal de protesta, una acción que se ha repetido este lunes con el objetivo de exigir en este caso otra medida para evitar que pueda repetirse algún caso similar: la contratación de un vigilante.
A las 21:30 horas del lunes 14 de enero tuvieron lugar los hechos que han despertado el temor de los profesionales de la salud de Laguna, cuando una de sus compañeras de 66 años sufrió una agresión por parte de una paciente, quien le propinó diversos golpes y puñetazos por no acceder a sus peticiones.
En este sentido, la nueva concentración ha tenido como objetivo demandar que se lleven a cabo todas las actuaciones necesarias para prevenir posibles agresiones y evitar que se den nuevos episodios violentos. Así, reclaman una seguridad privada que vele por la integridad física de los sanitarios que están ejerciendo su trabajo.
Fotografía: Santiago Bermejo.