El lagunero derrochó talento en la última novillada de la Feria consiguiendo tres orejas, en contraste con la actuación de Ángel Bustos, que no paseó ningún trofeo
Dice el refrán que nadie es profeta en su tierra, pero Daniel Medina supo ganarse este domingo al público de la última novillada de la Feria lagunera gracias a una magnífica actuación en el coso de su pueblo, donde al fin debutaba. El lagunero salió por la puerta grande después de cortar tres orejas tras una entretenida tarde en la que los novillos de la ganadería Zalduendo -de encaste Jandilla- estuvieron a la altura.
Medina, quien ya destacó este fin de semana en la Plaza de Santoña, derrochó talento especialmente con el primero de su lote, ganándose la ovación de un público entregado, y consiguiendo dos orejas. Un fallo al entrar a matar al segundo le impidió cerrar una faena memorable, si bien consiguió una tercera oreja. En contraste, el toledano Ángel Bustos no pudo pasear ningún trofeo al errar a la hora de dar muerte a sus astados.