La agrupación llegó a los sesenta integrantes, y ahora la conforman dieciséis parejas que el próximo año celebrarán el cuarenta aniversario desde su formación
En pleno 1980, un grupo de jóvenes de entre 12 y 13 años, compañeros de colegio, decidieron crear la peña ‘El Terror’ de manera oficial, una vez este grupo de amigos se separó de ‘El Desmadre’. Una agrupación formada solo en sus origines por varones, situación que no cambiaría hasta 1989, cuando las parejas de algunos de los miembros de la peña, entraron a formar parte de esta gran familia.
Si por algo se ha caracterizado ‘El Terror’ a lo largo de estos 39 años de historia es por hacer de las fiestas un lugar de encuentro para vecinos y peñistas, manteniendo abiertas las puertas de su local para tomar un buen vaso de limonada. En este sentido reconocen cómo esta situación ha cambiado mucho, ya que “los jóvenes ahora no salen de peñas. Ya no se invita a la gente a los locales y se ha perdido un poco la esencia de esas fiestas de pueblo. Ahora vemos que hay un montón de cosas organizadas por el Ayuntamiento, y antes todo se reducía a las peñas y a los amigos. Quizás se ha perdido un poco a razón del alcohol. Antes con la limonada era todo alegría y las puertas de las peñas estaban abiertas las 24 horas para vecinos y forasteros”, apuntan.
En su haber han llegado a contar con hasta 60 miembros, sobre todo en la época de juventud, situación que ha ido variando con los años, ya que actualmente son dieciséis parejas las que conforman ‘El Terror’. Un denominativo que surgió gracias a las pinturas existentes en uno de sus innumerables locales -en concreto en el de la calle Huertas, a la altura de Correos-, donde se apreciaban una serie de figuras bastante siniestras. En el año 1993 establecieron como “cuartel” definitivo un local ubicado en la Calle Cascajo, lugar donde año tras año continúan con la tradición de la limonada, las fiestas y una lista innumerable de citas gastronómicas para disfrutar de las patronales de una manera muy particular. “Somos los de siempre, y hemos tenido la suerte que nuestras mujeres hayan conseguido congeniar. Se han ido algunos, y han llegado otros, pero la sus últimas incorporaciones datan del 2004”, señalan.
Entre sus anécdotas, apuntan cómo, con apenas 15 años, “nos tuvieron que dar vino en ‘El Fregao’ porque acabamos las existencias de limonada. También, y como peña pionera, recuerdan que gracias a la mayoría de edad, incluyeron para sus desplazamientos los coches, decorados especialmente para tal ocasión.
Pese a ser una “peña bastante anárquica”, como ellos mismos reconocen, los planes siempre salen bien, fruto, en parte, al buen rollo existente entre sus miembros. ‘El Terror’ también ha destacado en las diferentes competiciones deportivas y en el desfile de carrozas, con especial protagonismo en el baloncesto. En fútbo no corrieron con la misma suerte, al estar entonces, según afirman, Minguela, en el equipo rival (quien por entonces ya era jugador profesional).
El próximo año cumplirán cuatro décadas, y como “clásicos” de las patronales, miran con anhelo esa unión existente entre las peñas hace años. Unas vivencias que han hecho que ‘El Terror’ se haya convertido en una gran familia que se reúne a lo largo de todo el año.
